Cómo empezó todo

Todo empezó con un botón dorado. En la antigua Checoslovaquia era imposible encontrar un botón dorado antes de la década de 1990, recuerda con una sonrisa en su rostro el propietario de la empresa STOKLASA, el Ing. Leo Stoklasa, quien junto con su esposa iniciaron el negocio:

«Mi esposa quería un vestido con botones dorados, vio una foto en la entonces popular revista BURDA, pero los botones dorados fueron lo más difícil de encontrar. Tuvimos que viajar al cercano país de Polonia para encontrarlos. Nos dimos cuenta de que las tiendas en Polonia estaban abastecidas no solo con botones, sino también con hilos, forros y otros artículos que faltaban en el antiguo mercado de Checoslovaquia. Así nació la idea y luego la empresa».

Este empresario de éxito recuerda los inicios de su negocio que empezó en el primer piso de la casa de sus padres. Las importaciones transfronterizas no eran comunes en los años noventa, por lo que había una gran demanda de bienes importados. Pero era necesario cargar el automóvil y conducir personalmente a varias tiendas y ofrecer los productos. Muy pronto se contrataron más vendedores para conducir a diferentes lugares del país y países cercanos.

«Hace unos años, el 90 % de nuestros productos se vendían desde nuestras furgonetas, también enviábamos a Eslovaquia, Polonia y Hungría. Consumía mucho tiempo y también era caro. Afortunadamente, Internet llegó justo a tiempo para iniciar la tienda en línea».